El plato que os quiero dar a conocer hoy es una sopa que se prepara en el extremo Norte de Italia: nos encontramos en la región de Trentino-Alto Adige, más precisamente en la parte septentrional de la región, es decir el Alto Adige que corresponde a la Provincia Autónoma de Bolzano. Como se desprende del nombre de la receta, en esta región los idiomas oficiales son tanto el italiano como el alemán (nos encontramos en la frontera con Austria y Suiza) y la gastronomía del territorio es un reflejo de tradiciones culinarias de países diferentes. De hecho la Sopa de Crespelle (en alemán “Frittatensuppe”) es un plato que tenemos en común también con otros países: Austria, Alemania, Suiza, Francia y Hungría….países con los cuales hemos compartido historia, destinos, guerras y fronteras y con los cuales afortunadamente hoy en día podemos compartir cosas más placenteras como algunas tradiciones gastronómicas!
Esta receta es muy sencilla y su presentación es muy cautivadora; es una sopa exquisita y estoy segura que con el frío que está llegando aquí en Madrid os apetecerá mucho probarla!
Entonces manos a la obra… el buen resultado está garantizado!

Ingredientes (para 3-4 porciones):

1 litro y medio de caldo de carne*
*(podéis preparar el caldo con carne vacuna o con pollo: será suficiente una pieza de carne de 500 gr., 1 zanahoria, 1 rama de apio, una cebolla y sal cuanto basta. Se deja hervir en agua durante hora y media o dos y luego se filtra el caldo para que esté transparente).

Para las Crespelle:

150 gr. de harina
250 ml. de leche
2 huevos
40 gr. de mantequilla (o margarina), más un poquito para untar la sartén
1 pizca de sal
1 pizca de nuez moscada
cebollino (o perejil) para decorar

Preparación:

Primero hay que preparar el caldo de carne y luego se filtra con un colador para que esté transparente (foto 1).
Para preparar las crespelle es muy sencillo: en un cuenco mezclamos la harina, la sal y vamos añadiendo poco a poco la leche tratando de evitar que se formen grumos. A continuación añadimos los huevos batidos, una pizca de nuez moscada y la mantequilla fundida. Mezclamos bien y vamos a cocinar las crespelle (foto 2).
Calentamos bien una sartén antiadherente y untamos el fondo con un poco de mantequilla (si se posee una sartén para crepes mucho mejor!).
Cuando está bien caliente ponemos un par de cucharadas del compuesto para las crespelle, esparcimos bien de manera que tome forma redonda y dejemos cocinar unos minutos (foto 3). Con una espátula damos la vuelta a la crespella y dejamos que se cocine también por la otra cara (foto 4).
Repetimos esta operación hasta terminar con todo el compuesto.
Cuando las crespelle se hayan enfriado bien (sino se rompen!), las enrollamos (foto 5) y las vamos a cortar en rodajas (foto 6 y 7).

Ponemos estas rodajas de crespelle en un plato y les vertemos encima un poco de caldo de carne bien caliente. Decoramos con cebollino triturado (o perejil) y servimos.

Buen Provecho!!! :)